Salida: 8:00am
Precio: $62 , por persona
Niños de 6-10 años: $31 Niños de 0-5 años: gratis
Mínimo: 2 personas
Entrada: $15 p/p, no incluida. *Para nacionales varía.
Incluye: Transporte, emparedados, bebidas y guía.
La Hacienda Curú fue establecida por el Señor Federico Schutt en 1923. En 1974 parte de la hacienda fue ocupada por precaristas en el área hoy conocida como Valle Azul. Preocupados por el impacto humano en la naturaleza, la familia Schutt aplicó por el estatus de “Área protegida” para todas aquellas áreas de manglar y bosque virgen en su poder. La Reserva de Vida Silvestre fue creada en 1983.
De 1,275 hectáreas de área protegida, el 75% está declarado como Bosque Protegido, 5% Refugio de Vida Silvestre y 20% está dedicado a la ganadería y a los experimentos sobre agricultura sostenible.
Parte del refugio es un bosque primario y su acceso es totalmente restringido a científicos. Sin embargo, existen 11 senderos abiertos al público que brindan la oportunidad de explorar diversos hábitats.
De los variados programas que hay en Curú, los más exitosos han sido la reincorporación de la Lapa Roja y el Mono Araña a su hábitat natural. Hoy en día es prácticamente imposible el encontrar este mono en otras partes de la Península.
La facilidad de poder observar diferentes clases de animales y aves en casi cualquier parte, hace de Curú un lugar diferente a los demás. Esto se debe a su combinación de finca, refugio de vida salvaje y que cuenta con al menos 5 diferentes hábitats.
En Curú han sido identificadas al menos 232 especies de aves, como pájaro bobo, chocoyos, guaco, pájaro carpinteros y garzas.
Entre los mamíferos encontrados aquí hay especies poco comunes como los Ocelotes, Pumas, Tigrillo de cola blanca.
También es común ver grandes grupos de monos aulladores y cara blanca, al igual que iguanas, Coatis de nariz blanca y por supuesto Pizotes.
En la playa las tortugas Baula, Lora del Pacífico y Carey depositan sus huevos.
No olvide traer su cámara, bloqueador solar y algún dinero para gastos personales. Vista preferiblemente en pantalones largos, zapatos cerrados, sombrero y lentes oscuros.